Reflexiones sobre la crisis en Europa

La cohesión social y la crisis europea

Social cohesion and the European crisis.

Europe is or was the father of the welfare state. Unfortunately, the crisis is destroying the welfare state and social cohesion in Europe.

Fruto de las conversación que tuve con mi colega Guido Zack que estuvo unos días en el ILAS de la Universidad de Berlín y de un trabajo que llevamos a cabo conjuntamente (IELAT www.ielat.com y  CAF www.caf.com) adjuntamos este post que creo puede servir de reflexión sobre temas que son de interés y que muchas veces pasamos de largo.

Ante mi primera preguntar acerca de qué pensaba sobre la crisis, un colega de la Universidad de Alemania, me respondió en broma: “¿qué crisis? ¿la del sur de Europa? La vida de los alemanes no se modificó para nada en los últimos años”. Más allá del chiste, creo que en esa frase resumió un punto clave para entender las medidas de las autoridades europeas ante la situación actual.

Alemania es un país que se benefició mucho por la unión monetaria, quizá haya sido el más beneficiado. Para notarlo solo hay que observar la evolución del balance de cuenta corriente, que en el año 2000 presentaba un déficit de casi el 2% del PIB, mientras que en 2007 alcanzó un superávit de 7,5%. En 2012, a pesar de la recesión, mantuvo un superávit de casi 5,5% del PIB.

Pero esto ya es historia, y al tomar las decisiones de políticas no se suele mirar al pasado, sino al presente y futuro. El país  germano, luego de la caída del nivel de actividad en 2009, mostró una notable recuperación, ya que creció al 4% y 3% en 2010 y 2011, respectivamente.  Si bien en la actualidad está decreciendo levemente, y no se espera que retome esos valores de variación del PIB, tampoco se espera que el menor nivel de actividad tengo un impacto en el mercado de trabajo. En efecto, no se proyecta que su tasa de desempleo supere el valor presente situado en 5,2% de la PEA, el menor nivel desde la unificación. Para resaltar esto último:  hoy Alemania tiene un desempleo menor que en 2007, antes de que estallara la burbuja.

En relación a la inflación, luego de la caída en el nivel de variación de precios en 2009  (casi cero), comenzó un incremento hasta siturase en 2,5% en 2011. Evidentemente este fue un valor inaceptable por las autoridades alemanas, ya que fue cuando el Banco Central Europeo redujo los estímulos monetarios.

Finalmente, el Estado germano tiene un equilibrio presupuestario global, es decir que muestra un superávit primario. Por su parte, si bien su nivel de endeudamiento alcanza al 83% del PIB, no respetando el límite del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, se proyecta una tendencia decreciente a partir del presente año, en línea con el superávit primario.

Todos estos datos corroboran el comentario de mi colega alemán. La crisis no está en Alemania. Esta es la única forma de comprender muchas de las medidas de las autoridades europeas, pues parece que se fijan principalmente (por no decir únicamente) en los datos macroeconómicos de aquél país. De otra manera no se entiende, por ejemplo, la intervención en Chipre y la negativa del Banco Central Europeo para respaldar, al menos, los depósitos (tema analizado en un post reciente).

Esto nos lleva a pensar en un tema que está hace mucho tiempo instalado en América Latina:  la cohesión social. De hecho, actualmente en el IELAT de la Universidad de Alcalá estamos llevando a cabo, junto a la CAF, un proyecto en el que se incluye un foro de fiscalidad y cohesión social. El Consejo de Europa define la cohesión social como “la capacidad de una sociedad para asegurar el bienestar de todos sus miembros, minimizar las disparidades y evitar la polarización: una sociedad cohesionada es una comunidad de apoyo mutuo compuesta por individuos libres que persiguen estos objetivos comunes por medios democráticos”.

En este contexto, el Estado de Bienestar aparece como el referente que los miembros de la sociedad valoran lo suficientemente como para respaldar un pacto social, y un pacto fiscal, en virtud del cual la solidaridad plasma en significativas transferencias de los activos a los pasivos, de los que tienen más a los que tienen menos, de los adultos a los menores y a los ancianos.

Europa es o era el padre del Estado de Bienestar, el continente donde posiblemente se haya dado un grado de cohesión social sin precedentes. Lamentablemente, la crisis está acabando con el Estado de bienestar, y con la cohesión social europea. ¿O no será justamente que la falta de esta cohesión social entre habitantes de diferentes países de la Zona Euro es la que está provocando la crisis y evitando que seamos capaces de solucionarla?.

Encontrar la causalidad seguramente no nos llevará a la situación pre crisis pero si puede ayudar a entender porqué de algunos comportamientos en el seno de la unión , del BCE y sobre todo, de los dirigentes y colectivos de los países de la UE.